Hay muchas formas de brindar un servicio a los demás u no todas se basan en la disposición de recursos materiales. Te damos algunas ideas para poner en práctica, si es que tienes la disposición y no sabes por donde empezar.
Ø Ofrece tu ayuda antes de que te lo pidan: Para ello, debes mantenerte atento a las necesidades de los otros, tanto si se trata de personas muy cercanas a ti como de otras menos familiares. Tal vez en tu familia hay algún anciano o alguna persona enferma que está sola y le vendría bien un poco de compañía. Puedes ir a verla una tarde y leerle un libro, acompañarla a hacer las compras o simplemente conversar…
Ø No es necesario que esperes a que alguna institución oficial, barrial o religiosa inicie una campaña solidaria. Si quieres colaborar con los más necesitados, tú mismo puedes comenzar definiendo tu objetivo y comunicándolo a tus familiares, maestros y compañeros. Seguramente la iniciativa será bienvenida y se propagará de boca en boca. “Ayúdame a ayudar” es una buena consigna que puedes utilizar para motivar a los tuyos.
Ø Nunca impongas condiciones para colaborar. Lo que si puedes hacer, en el caso de que te acerques a alguna institución de bien público, es dejar en claro que es lo que tú estás dispuesto a hacer, de que horarios dispones, que es o que sabes hacer mejor…
Ø No debes angustiarse si no encuentras reconocimiento. Éste no siempre llega cuando uno lo espera. Además, no hay mejor recompensa para una buena acción que haberla realizado.
Ser solidario se trata de ayudar a personas que lo necesitan y este texto nos da a conocer que personas capaces, no podemos ayudar y no tenemos disposición propia para ponerse de acuerdo con las personas que lo necesitas;
ResponderEliminarmuy buen gesto de honor para toda esa gente enferma...
*nahoimi fernandez correa *
trabajo de maketing;
3ªJ insuco de chile 04/2009